La justicia chilena reconoció su error y determinó el viernes 1° de marzo otorgar la libertad pura y simple de los tres soldados bolivianos, que permanecieron detenidos desde el 25 de enero en ese país, e instruyó su salida de territorio chileno y no retornar por el plazo de un año.
La audiencia extraordinaria que se celebró en el Juzgado de Pozo Almonte, en Iquique - Chile, comenzó al promediar las 09.20 (hora boliviana) y duró aproximadamente media hora. A esta acudieron los soldados José Luis Fernández, Augusto Cárdenas y Alex Choque vestidos con el uniforme militar y la frente en alto.
Ante la pregunta del Magistrado a cada uno de los soldados si aceptaban la nueva propuesta de la Fiscalía, ellos en un tono firme respondieron, por separado “ACEPTAMOS, SOMOS INOCENTES”, aclarando uno de ellos que el caso debió haber sido resuelto por la vía diplomática.
El Juez que dirigió la audiencia, Roberto Hernández explicó que la única condición para esta liberación es que los militares bolivianos no retornen a Chile durante un año, algo que fue aceptado por la defensa de los soldados, por lo cual resolvió la suspensión condicional del procedimiento instaurado en contra de los conscriptos.